Entre los grandes clásicos de la ciencia-ficción, tenía pendiente ver este Planeta Prohibido, la versión clásica de 1956, y aprovechando mi primer día de vacaciones, al fin lo he hecho y me ha gustado mucho, la verdad.
Estamos en 1956, así que nadie espere grandes despliegues de efectos especiales ni nada por el estilo, pero sí imaginación a raudales y una historia muy buena, con moraleja, sobre la evolución de las especies.
También es importante por la aparición de Robby el robot inteligente, incapaz de matar a un ser humano y que sirve como icono de otros robots "inteligentes" como C3PO, R2D2, y tantos otros que han aparecido en películas posteriores.
Entre las curiosidades, ver a Leslie Nielsen haciendo un papel distinto de "[pon aquí lo que quieras] como puedas" que es para lo que quedó en las épocas más recientes.
La historia transcurre en el siglo XXII, cuando el hombre ha conquistado definitivamente las estrellas y domina la hipervelocidad. Una nave de la Unidad de Planetas viaja a un planeta al que se envió una expedición hace más de veinte años y del que no se ha sabido nada. Cuando llegan, encuentran a dos supervivientes (y al robot), además de los restos de una antigua civilización.
Y no puedo decir más, que al final la destripo. Como decía al principio, hay que verla con ojos inocentes, de hace sesenta años cuando la exploración espacial apenas se había iniciado, y apreciar las cosas buenas que tiene, que son muchas.
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